Alicia G. Arribas
Cancún (México), 20 abr (EFE).- El español Juan Antonio Bayona, flamante ganador de los Premios Platino, tras conseguir seis de los siete galardones a los que optaba, dijo este sábado que «a veces hay que hacer las cosas diferentes para cambiar las reglas del juego, porque España tiene las herramientas adecuadas para hacerlo».
En una gala en la que la industria española se impuso a la latina, tanto en series como en cine, ‘La sociedad de la nieve’, de Bayona, se ha convertido en todo un símbolo de lo que se puede conseguir a través de la colaboración entre países.
De hecho, Bayona ha aprovechado su posición privilegiada esta noche en el escenario del Teatro Gran Tlachco de Riviera Maya para lanzar a la vapuleada cultura argentina un salvavidas emocional: «Estar en contra del cine es estar en contra de tu país. Argentina, no estáis solos, aquí nos tenéis».
Cecilia Roth, la combatiente Platino de Honor que pide por su cine
Un escenario de una gala histórica en la que también Argentina ha estado muy presente, y no solo por la nacionalidad de la actriz ganadora del Premio de Honor 2024, Cecilia Roth, quien en su discurso de agradecimiento ha reclamado “resistencia” para aguantar «esta lucha por el cine que hacemos».
La actriz, musa de Pedro Almodóvar, ha recibido esta noche su primer premio a toda una vida dedicada al cine, un homenaje a su sobresaliente trayectoria en la industria cinematográfica de ambos lados del océano.
Unos premios muy españoles, con 17 estatuillas de 23 posibles
Aunque ‘La sociedad de la nieve’, ha sido la gran vencedora, las ‘20.000 especies de abejas’ de Estíbaliz Urresola ha logrado hacer realidad los cuatro premios a los que optaba, un pleno que tanto la directora, como la productora Valerie Delpierre, han agradecido de corazón.
«Basta de cosificar y cambiemos la narrativa», ha reivindicado la directora vasca, cuya película está dedicada a la identidad sexual de una niña de once años que ha nacido en el cuerpo de un chico.
Ane Gabarain ganó el premio como actriz de reparto por su papel de la comprensiva tía de Cocó-Lucía (Aitor) y Urresola fue mejor directora novel y mejor guionista; además, se llevó el premio del cine en valores.
‘Robot Dreams’, la cinta de animación de Pablo Berger, se llevó el Platino de su categoría, y también el de mejor música original, y ‘La mesías’, sin que sus creadores estuvieran nominados, fue premiada con dos estatuillas: mejor actriz protagonista de una serie (Lola Dueñas) y mejor actriz de reparto (Carmen Machi).
Y también Jose Coronado (actor de reparto en ‘Cerrar los ojos’) y Laia Costa (mejor actriz protagonista por ‘Un amor’).
‘Barrabrava’, Andy Chango, ‘El conde’ y Alfredo Castro sujetan el pabellón latino
Con Bayona, alcanza el olimpo de las series ‘Barrabrava’, la violenta versión del hampa que rodea los campos de fútbol argentinos a través de la vida de dos hermanos expulsados de la ‘barra brava’ de su club favorito (una hinchada fanática de fútbol), que se estrenó en Amazon Prime el 23 de junio, con gran éxito en Latinoamérica y un muy discreto paso por España.
Alfredo Castro, impresionante en el papel del dirigente asesinado Salvador Allende en la serie ‘Los mil días de Allende’ y Rodrigo Bazaes, el director de arte de la película de Pablo Larraín ‘El conde’, donde también actúa Castro como deleznable vampiro esclavo de Pinochet, le quitó el único galardón que no se llevó Bayona de los ocho a los que aspiraba.
Rotunda carrera la del equipo de Bayona con ‘La sociedad de la nieve’, que alcanza esta noche los 45 galardones después de más de un centenar de nominaciones, los últimos acuñados este fin de semana en Xcaret (Riviera Maya) donde el público, por un lado, y los jurados de los Premios Platino, por otro, contribuyeron con los últimos ocho premios.
‘La sociedad de la nieve’ es ya una de las películas más indispensables de la cinematografía en español, una coproducción entre España, Uruguay, Argentina y EE.UU. que está dando la vuelta al mundo tanto en salas de cine, como a través del streaming en Netflix, también productora de la cinta.
La película, basada en un caso real, recrea el accidente aéreo de un equipo de rugby uruguayo que se estrelló en 1972 los Andes con 45 personas a bordo, de las que solo sobrevivieron 16, después de 72 días de resistencia imposible y tras sacrificar convicciones personales, muchas de ellas, ligadas a la religión católica.