En la 44 Sesión Plenaria del Congreso de Intendentes, se presentó una importante modificación en el orden del día para abordar la situación crítica de las vías rurales y suburbanas del país. Durante la sesión, que contó con la presencia del director y subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Cr. Fernando Blanco y el Ing. Benjamín Irazábal, se propuso oficialmente la declaración del Estado de Emergencia Nacional para la caminería rural y suburbana.
La iniciativa, impulsada por el presidente del Congreso de Intendentes, el Ing. Agr. Enrique Antía, busca enfrentar los desafíos impuestos por el deterioro notable de estos caminos, esencialmente agravados por las inclemencias climáticas recientes. «Es crucial conocer el estado actual de nuestras infraestructuras para poder actuar de manera eficaz», destacó el Cr. Blanco durante su intervención. Subrayó la necesidad de recopilar datos precisos de los gobiernos departamentales para, a partir de esa información, replantear el uso del Fondo de Desarrollo del Interior (FDI), con el objetivo de financiar las necesarias tareas de mantenimiento y reparación.
Por su parte, los intendentes reafirmaron la urgencia de mantener en óptimas condiciones la caminería, no solo por su importancia en el ámbito agrícola y de producción sino también por ser una respuesta vital ante las consecuencias del cambio climático que afectan directamente a la región.
La propuesta establece que cada intendencia deberá reportar un inventario de los daños existentes a la Mesa del Congreso de Intendentes, que a su vez coordinará la comunicación con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto. Este mecanismo busca optimizar las respuestas y asegurar una distribución eficiente de los recursos del FDI.
La declaración de emergencia surge como una medida indispensable ante la necesidad de garantizar vías de comunicación seguras y eficientes, fundamentales para la movilidad de la producción agropecuaria y el bienestar de las comunidades rurales y suburbanas del país.