Asunción, 28 abr (EFE).- Autoridades, docentes, estudiantes y jinetes que recorrieron más de mil kilómetros hasta Asunción celebraron este domingo el centenario de una escuela fundada en honor al general José Gervasio Artigas, la única del sistema público de Uruguay en el exterior y que funciona en el lugar donde el prócer pasó sus últimos días.
Los ministros paraguayos de Educación y Ciencias, Luis Ramírez, y de Cultura, Adriana Ortiz, encabezaron la celebración junto a sus colegas de Educación y Cultura de Uruguay, Pablo da Silveira, y la presidenta de la Administración Nacional de Educación Pública, Virginia Cáceres, entre otras autoridades.
La ocasión reunió además a emocionados alumnos de le escuela Artigas del Solar de Artigas que ondeaban banderas de ambos países, docentes y un grupo de jinetes que partió de suelo uruguayo y fue recibido el viernes en la capital paraguaya.
«Esto es una fiesta de la hermandad entre dos pueblos que comparten una larga historia y que hace un siglo empezaron esto, antes de que existiera el Mercosur, antes de cualquier experiencia de integración, que es un ejemplo formidable de integración entre dos países», destacó Da Silveira, en declaraciones a periodistas.
El funcionario destacó como «un gesto de amor» el recorrido emprendido por jinetes uruguayos que atravesaron Argentina y parte de Paraguay a caballo con cartas y mensajes de estudiantes dirigidos a niños paraguayos.
«Esto es un pedacito de Uruguay en Paraguay y además año tras años egresan generaciones de alumnos paraguayos que se educaron conociendo Uruguay, queriendo Uruguay, visitando Uruguay y eso fortalece los lazos», agregó.
Por su parte, Ortiz consideró que este centenario «significa la hermandad entre dos pueblos que tienen lazos profundos de amistad».
La titular de Cultura recordó que Paraguay otorgó a Uruguay el predio donde está ubicada la escuela en respuesta al gesto de ese país de devolver los trofeos de la guerra de la Triple Alianza (1864-1870).
En esa confrontación, Paraguay se enfrentó a Brasil, Argentina y Uruguay.
«El mensaje más importante de hoy en todo el evento fue eso, la unidad máxima de una nación y que esta nación es Sudamérica», agregó.
Uno de los jinetes, el coronel del Ejército uruguayo Daniel de Armas, consideró «histórico» que las autoridades de Argentina y Paraguay permitieran que un «puñado de diez orientales» cruzara por primera vez a caballo el puente que une a las ciudades de Posadas y Encarnación.
«Para nosotros fue elegir este camino de Encarnación, el mismo camino que hizo Artigas en 1820, cuando buscó el exilio acá en Paraguay. Nos llevó 1.040 kilómetros llegar acá a Asunción desde el 27 de marzo hasta el 25 de abril», explicó a EFE.
Otro de los viajeros, Diego Fleitas, recordó cómo se convirtieron, incluso bajo la lluvia, en el correo de niños uruguayos que enviaron más de mil cartas a los niños paraguayos.
Visiblemente emocionado, recordó que en el predio de la escuela se encuentra el árbol ibirapitá, donde Artigas instruía a niños y jóvenes paraguayos.
«El hombre fue un educador y aparte de ser un héroe, fue un educador», destacó.
También en esta fecha Lilian Elizamor, de 45 años, y Amanda Flores, de 79 años, recordaron sus años como estudiantes y de esta escuela ubicada en el barrio Santísima Trinidad de la capital paraguaya.