Con el creciente uso de la tecnología en la vida cotidiana, los adultos mayores se han convertido en un blanco frecuente de fraudes digitales. Según datos del FBI, solo en EE.UU., más de 88.000 personas mayores de 60 años perdieron más de 3.100 millones de dólares en estafas en línea. ESET, compañía líder en ciberseguridad, advierte sobre los principales riesgos y brinda recomendaciones clave para protegerse.
Las 5 principales amenazas digitales
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Phishing o estafas por correo electrónico: Mensajes fraudulentos que buscan engañar a los usuarios para que descarguen archivos maliciosos o hagan clic en enlaces peligrosos. Pueden presentarse como premios falsos, amenazas de bloqueo de cuentas o deudas inexistentes.
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Llamadas telefónicas fraudulentas: Delincuentes se hacen pasar por técnicos o familiares en apuros para obtener información personal o financiera. Mantener la calma y no brindar datos sensibles es fundamental.
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Estafas en redes sociales y sitios web: Perfiles falsos, enlaces sospechosos y ofertas demasiado buenas para ser verdad suelen ser utilizadas para robar información o dinero.
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Secuestro de cuentas: La reutilización de contraseñas facilita el acceso de los ciberdelincuentes a múltiples servicios. Se recomienda usar claves únicas y robustas, almacenadas en gestores de contraseñas.
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Estafas con códigos QR: Estos pueden redirigir a sitios maliciosos diseñados para robar información personal. Antes de escanear un código, es importante verificar su origen.
Consejos para una navegación segura
- No compartir información personal o bancaria por teléfono, correo o redes sociales sin verificar la identidad del remitente.
- Usar contraseñas seguras y activar el doble factor de autenticación en cuentas importantes.
- Evitar hacer clic en enlaces sospechosos, incluso si provienen de contactos conocidos.
- Mantener sistemas y aplicaciones actualizados para reducir vulnerabilidades.
- Evitar redes Wi-Fi públicas al realizar transacciones bancarias o ingresar datos sensibles.
Cómo ayudar a los adultos mayores
ESET recomienda que familiares y allegados acompañen a los adultos mayores en la configuración de sus dispositivos y fomenten un ambiente de confianza para que consulten antes de tomar decisiones en línea. Revisar juntos configuraciones de privacidad y aprender en conjunto puede prevenir muchas estafas.
«La educación en ciberseguridad es clave, sin importar la edad. Si alguna recomendación técnica resulta compleja, lo ideal es contar con el apoyo de un familiar o un técnico de confianza», destaca Camilo Gutiérrez Amaya, Jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica.
Prevenir estafas en línea es posible con información y precaución. La ciberseguridad no tiene edad.
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