Airbnb, una empresa de Estados Unidos, sería para un hotel lo que para los taxistas es Uber, ya ofrece 38 propiedades en Carmelo y cercanías. En Colonia del Sacramento hay unas 219 publicaciones. En Conchillas y su zona la oferta es de 48 casas.
Cada vez más personas en Carmelo obtienen un ingreso extra alquilando su vivienda en verano e incluso en otras temporadas. Internet es una significativa fuente de difusión de estas ofertas. La plataforma airbnb, que facilita el alquiler entre particulares, viene registrando cifras récords en el mundo.
El rápido crecimiento de los portales web que hacen de intermediarios entre particulares es una prueba de su éxito y de una necesidad latente. Cualquiera puede anunciar su casa en estas plataformas, cumpliendo con una serie de requisitos, tanto de habitabilidad como de información en el anuncio. Así, las ofertas están estandarizadas según unos datos básicos. Los usuarios pueden comentar sobre un alojamiento y valorarlo (siempre después de haber estado al menos una noche en él), generando un entorno de confianza, ya que también se puede votar a los inquilinos.
El «Uber» de los hoteleros carmelitanos tiene en su página, cientos y cientos de ingresos de turistas que ya hace rato vienen utilizando estos servicios y lo dejan registrado, como en el libro de visitas de cualquier hotel.
El alquiler está asegurado por si se producen desperfectos durante la estadía. Habitualmente los anfitriones solo alquilan sus casas unas pocas semanas al año, ya que son residentes estables. Estas empresas obtienen sus ingresos de una comisión que se cobra principalmente al huésped, según el precio del alojamiento. En el caso de airbnb varía entre el 6% y el 12%, mientras que en 9flats.com, otra plataforma de alquiler privado, el porcentaje está entre el 10% y el 15%.
Este alquiler entre particulares por temporadas limitadas, habitualmente para vacaciones, no tendría respaldo legal en Uruguay, ya que no existe regulación alguna. Sin embargo algunas de las propuestas que aparecen en estas plataformas tributan en la categoría de hostales, pero la gran mayoría son familias que tienen dentro de su casa habitaciones para tales fines.
El agujero legal no solo existe en nuestro país, por ejemplo en Alemania, en ciudades como Hamburgo o Berlín, la legislación impone restricciones al alquiler particular, en la capital la norma varía incluso entre distritos.
Rivales para los hoteles y clientes para los negocios locales
Esta forma de pasar las vacaciones, por un lado, y de obtener ingresos extra, por el otro, es una tendencia en expansión y que tiene un alcance global.
Tradicionalmente se observa a estas plataformas como competidores naturales de los hoteles. Ofrecen alojamientos a veces más baratos y adaptables a las necesidades de los inquilinos. El proteccionismo con la industria turística, sobre todo en países donde ésta tiene mucha fuerza, lleva a las instituciones a poner algunas trabas al funcionamiento de estos servicios. Sin embargo, la llegada de visitantes siempre es una fuente de riqueza para su destino.
Estos portales ponen en contacto una oferta y una demanda que ya existía antes en el mercado. Y en los últimos años, los entornos sociales añadidos a los sitios web han aumentado la confianza entre los usuarios. Los votos, los comentarios y la posibilidad de preguntar dudas de una forma fluida contribuyen a crear un espacio con más garantías, sentando las bases para un mercado sólido, capaz de competir con el tradicional.
Con información de El Diario y Diario Turing.